Tegucigalpa.- Se trata de Luis Suazo, quien funge como de Honduras en Washington, pero para asombro de los hondureños, vino al pais para hacer le comparsa a Juan orlando Hernandez, quien es investigado por supuesto vinculos con el narcotrafico.
En su intervencion, durante una comparencia de Hernandez para desmentir lo que se dice en el Distrito Sur de New York expresó:
“Estos fiscales, con el propósito de lograr condenas, olvidaron que su trabajo era buscar la justicia (…). Hasta ayer por la tarde (martes) la palabra de los fiscales era palabra santa, pero hoy están bajo investigación por no haber hecho su trabajo como se debía de hacer”, dijo Suazo, quien fue nombrado en el cargo en septiembre de 2020.
Para el exfiscal general Edmundo Orellana, la posición del diplomático es “totalmente irregular, es anómala, por no decir grave”, ya que como embajador debe evitar intervenir en las cuestiones internas del país donde está acreditado y hacer apreciaciones subjetivas públicas sobre este.
De su lado, el director del Foro Social de la Deuda Externa y Desarrollo de Honduras (Fosdeh) Mauricio Díaz Burdett, consideró que los comentarios del embajador “presentan una afrenta importante de política exterior porque estamos hablando de la descalificación de una institucionalidad pública (…) sobre el fundamento de acusaciones de un solo caso que ha sido público por la misma Fiscalía de Nueva York”.
Orellana a su vez continuó recordando que Suazo es un funcionario público y debe actuar apegado a la ley, pero que esté defendiendo un asunto personal de Hernández es algo que está “totalmente fuera de su competencia y no está sirviendo al pueblo hondureño, está sirviendo al gobernante”.
En la misma línea, Burdett destacó que la acusación por la que ha reaccionado el embajador no es contra el Estado hondureño, ya que la misma “pone con nombre y apellido a la persona que efectivamente en este momento hace las funciones de Presidente”.
Lo dicho por el embajador, dijo además Orellana, descalificando el sistema judicial estadounidense por un caso específico que no significa que la institucionalidad de ese país está erosionada moralmente, sino que es la excepción a la regla, podría acarrearle consecuencias porque Estados Unidos tiene un argumento suficiente para declararlo non grato.
Para el Fosdeh, añadió Díaz Burdett, “es encontrar argumentos con una defensa inapropiada” y aunque pueda ser válido en el contexto hondureño, “en términos de un país donde funciona la institucionalidad lejos de contribuir puede más bien afectar”.
A su juicio, la cooperación con Honduras ya está afectada debido a la situación personal del gobernante, quien está siendo investigado en los tribunales federales de Estados Unidos, y por la iniciativa legal de los senadores.
En ese sentido, Díaz Burdett recordó que ya está claro lo que se ha solicitado en términos de suspensión de apoyo a las Fuerzas Armadas y a la Policía, “pero ahora entonces uno queda en la duda de que si habrá suspensión de cooperación para otros temas, para otras áreas que no necesariamente están vinculadas” a esas fuerzas de seguridad.
“Definitivamente va a haber repercusiones, porque en la ley se prevé, de aprobarse, que va a haber restricciones a los organismos multilaterales para cooperar con Honduras, de allí es de donde se van a derivar realmente los problemas”, dijo Orellana.
“Y es posible que hasta pudiera haber otras implicaciones en otros temas políticos y diplomáticos importantes”, agregó Díaz Burdett.