Tanto el azúcar como la grasa, cuando se encuentran en alimentos o dulces procesados, son malos para nuestra salud. Pero más aún cuando se abusa de ello, es decir, que se consuman en exceso.
Vamos a empezar con los azúcares
En este punto nos referimos al azúcar que se añade o que se encuentra en alimentos, dulces o comida chatarra. Es decir, aquella que es agregada de forma industrial. Estas suelen causar los siguientes problemas en la salud:
- No sacian el hambre.
- Este tipo de azúcar tienen 16 calorías por cucharadita, que sí no son quemados tienden a trasladarse en forma de lípidos a diferentes partes del cuerpo como los brazos, el abdomen, entre otras zonas, causando obesidad.
- También, excederse en su consumo puede causar enfermedades como la diabetes tipo 2, que proviene de una mala alimentación, y aumenta el riesgo de sufrir un ataque al corazón.
La Organización Mundial de la Salud (OMS), recomienda que las personas solo deben consumir un máximo de 12 cucharaditas de azúcar al día.
Ahora es el turno de la grasa
Cuando hablamos de grasa nos referimos a las saturadas, se encuentran en el chocolate, mantequilla, carne de vaca, de cerdo, entre otros alimentos. Y las trans, estas son caramelos, galletas, pastelería industrial, productos precocidos, etc. Todo ello, puede afectar la salud causando:
- Obstrucción de las arterias.
- Accidentes cardiovasculares.
- Aumento de masa corporal.
En este sentido, podemos concluir que ambos elementos son nocivos para nuestra salud cuando se consumen en exceso, dependiendo de las características de cada uno de nosotros.
Por eso es necesario limitar el consumo del azúcar y la grasa, para evitar que perjudiquen el buen funcionamiento de tu organismo y de tu salud física. Todo esto lo puedes evitar, cumpliendo con una dieta sana y equilibrada.
