La Mara Gubernamental (MG) se enteró que no se puede mantener sostenida solamente de los hilos militares, puesto que sus altos oficiales podrían entrar en confrontamiento interno por estar violentando sus razón de existencia fundamental según la constitución. Así es que no puede permitir que el sector de la «gran empresa» (pocas familias) se transformen en otro frente opositor. Por tal razón se dispuso a financiarlo con dinero público fresco. Además de entregarle los servicios públicos, durante los últimos 10 años para sus lucros, siendo que son más escasos ahora, y los que quedan ya no son lucrativos, esa MG se ve obligada a extraer del presupuesto administrativo para dárselo bajo la escusa de reparación de daños.
Como ese sector empresarial se asimila, en principios morales a quienes gobiernan, comportándose como una maquinita de monedas, le está dando resultados inmediatos. Solamente que ese sector es muy caro, son insaciables y el erario público tiene límites. El FMI le puede reprender y eso más pronto que tarde acabará. El país va a terminar como Puerto Rico, en total quiebra financiera, sin que venga nadie a darle respiración artificial, excepto los grandes buitres de la banca internacional, prestos a saciar su apetito depredador de cadáveres financieros.
Es por esto que la MG tiene que idear otra fuente para entretener a la cúpula militar y la empresarial. No dude que ya estén consultando posibles salidas a sus aliados Republicanos en Washington. Solamente que éstos tienen otros nudos cordianos en EUA, como son las elecciones de nuevos congresistas y están a punto de perder mayoría en su bancada. Si eso sucediera, los Demócratas amenazan con llevar a juicio político a Donald Trump. Algo que golpearía a la ultraderecha internacional.
Así que, a la MG catracha corrupta a ultranza, se le pone difícil sobrevivir el 2018. Y si la juventud catracha sigue dando golpes a esa MG, la predicción se concretará.
