Varias organizaciones del país han conformado un comité con el objetivo de lograr la liberación de los presos políticos y el cese a la persecución judicial contra los protestantes que se manifiestan contra el fraude electoral y la dictadura de Juan Orlando Hernández.
En la reunión, que se realizó en el Hogar contra el Olvido, centro de memoria que ha edificado el Comité de Familiares de Detenidos Desaparecidos en Honduras (Cofadeh) en Santa Ana, Francisco Morazán, participaron representantes de organizaciones de derechos humanos, magisterial, campesinas, sindicales, entre otras.
cracion comite1Preocupado por la situación que viven los presos políticos y sus familiares, el Cofadeh ha promovido la creación de este comité el que ha sido acogido por varias organizaciones sociales, ya que las personas que han sido detenidas en las protestas y posteriormente privadas de su libertad, pertenecen a varios sectores sociales.
La coordinadora del Cofadeh, Berta Oliva, indicó que la convocatoria realizada es para tener acciones colectivas y ver hasta donde las organizaciones se puedan comprometer en el trabajo para luchar por la libertad de los presos políticos, cómo se deberá hacer y cómo se deberá enfrentar, ante un régimen represor como el de Juan Orlando Hernández.
Indicó que uno de los casos emblemáticos es el de Edwin Robelo Espinal, preso en La Tolva, ya que la historia de él es bastante fuerte porque desde el 2009 ha sido víctima de seguimiento, persecución y ataque por parte de las autoridades policiales del país, al grado que perdió a su compañera de hogar producto de la inhalación de gases lacrimógenos, un hermano fue asesinado y fue obligado por FUSINA (Fuerza Nacional de Seguridad Interinstitucional) a abandonar su residencia.
Robelo Espinal fue detenido la noche del 19 de enero del año en curso por suponerlo “cabecilla” del incendio en el hotel Marriot, el pasado 12 de enero tras una brutal represión militar- policial.
Oliva señaló que se debe hacer entender a la gente que todas las personas detenidas durante las protestas son por cuestiones políticas, pese a que el gobierno quiere blanquearlo a acusarlos de delitos comunes para dar a entender que se están metiendo presos a personas por delitos comunes y no por razones políticas.
“Es una de las decisiones más acertadas que se deben de hacer y obviamente es un trabajo que no se debe de quitar el dedo sobre la llaga porque hay familiares que están sufriendo por esta situación y el régimen simple y sencillamente está engañando a la gente que todo es color de rosa”, señaló Benedicto Santos, abogado y defensor de los derechos humanos que ha estado en las postas y en los juzgados acompañando legalmente a las personas que han sido detenidas durante las protestas.
Después de las elecciones del 26 de noviembre de 2017, cuando se comenzó a fragua el fraude electoral para imponer la reelección de Juan Orlando Hernández, las protestas no se hicieron esperar y las fuerzas represoras del estado comenzaron a atacar violentamente a los manifestantes que salieron a protestar por lo que se está gestando contra la voluntad del pueblo hondureño.
Ante esas violaciones, las organizaciones de derechos humanos comenzaron a realizar las denuncias correspondientes a nivel internacional, donde se ha demostrado que en Honduras se vive en una de las peores dictaduras.
Las personas que están siendo detenidas durante las protestas las autoridades policiales y del Ministerio Público les imputan delitos no relacionado la lucha política sino de delitos comunes, con el fin de blanquear que en Honduras existen presos políticos.
rafael alegria“No están llenando las cárceles de delincuentes sino de presos políticos pero con connotación delincuencial que es la que el estado les quiere pegar.”, sostuvo el abogado Santos.
Señaló que los más de 200 hondureños procesados y enjuiciados por esta lucha contra el régimen de Juan Orlando Hernández, a ninguno de ellos se le acusado por un delito de orden común sino que son por tomas, por daños, pero el verdadero hecho que llevó al ejército y la policía a capturar a esa persona es para reprimir, es para evitar que las personas protesten.
“Se está criminalizando la protesta de tal manera para que el Gobierno a nivel internacional dé la imagen de que no hay presos políticos en Honduras, les cambia el delito, pero sí son presos políticos porque han sido detenidos por protestas políticas y no por delincuencia común”, subrayó el abogado Benedicto Santos.
Para Daniel Esponda, representante del gremio magisterial, en esta lucha no se debe abandonar ni a las familias de los presos políticos ni a ellos que guardan prisión de manera ilegal, en un proceso de indefensión porque no existe un estado de derecho en Honduras.
“En Honduras no existe estado de derecho y aquí se ha orquestado un estado represor, intimidador que no va a escatimar esfuerzo ni jurídico, ni penales, ni ningún tipo de manipulación de la Ley para aleccionar al que se oponga”, sostuvo el dirigente magisterial.
Es del criterio que la aprobación del Ley terrorismo se hizo porque ya estaba planificado el fraude electoral y estaban consciente que el pueblo se iba a mostrar en insurrección y que iba a luchar contra el fraude y que les está sirviendo hoy para perseguir de manera política y penal a los manifestantes.
Debemos tener una cosa clara en el país y la comunidad internacional también debe estar clara que en honduras se ha instalado una dictadura que pareciera que tuviera tinte constitucionales, pero que a todas luces viola la misma ley y las leyes que ellos han generado para perseguir a todos aquellos que se opongan a sus procesos de corrupción, de enriquecimiento ilícito y a quedarse en el poder a como dé lugar, señaló Esponda.
En la reunión estuvo presente el coordinador de la Vía Campesina Rafael Alegría quien sostuvo que hay una intención clara de la dictadura de mantener en prisión a gran cantidad de manifestantes que se oponen al régimen de Juan Orlando Hernández para intimidar al pueblo hondureño.
“Nos hemos organizado en este comité por la liberación de los presos políticos y se van a realizar movilizaciones permanentes, las denuncias nacionales e internacionales, y tenemos la firme esperanza de que saldrán pronto de ese cautiverio terrible que los tienen sometidos, inclusive en celdas de máxima seguridad como si fueran grandes delincuentes”, expresó el dirigente campesino.
Asimismo agregó que en esta lucha hay personas presas de todos los sectores y este comité los viene a unificar a todas las organizaciones y sectores y que espera que otras organizaciones sociales y personas que están en la defensa de la democracia del país se unan a este espacio de lucha por la libertad de los presos políticos.
También indicó que no se descansará hasta que sean castigados a los responsables de los asesinatos de más de 36 hondureños que han caído en esta lucha contra el fraude electoral y la dictadura de Juan Orlando Hernández.
“Hasta ahora no hay ninguna investigación por parte de una institución del Estado por los que han caído que ya son alrededor de los 40 hondureños y eso lo sabe la comunidad internacional, el estado y el pueblo hondureño, y este comité se va a encargar de hacer una campaña nacional e internacional para que el mundo sepa lo que está pasando en Honduras en cuanto a las violaciones a los derechos humanos”, señaló Rafael Alegría.
Sobre la conformación de este comité, Carlos del Cid, director del Observatorio Ecuménico Internacional de los Derechos Humanos (OEIDH), su primera valoración que saca es que a los presos políticos no los van a dejar solos, porque ahora se harán acciones colectivas, pensadas en función de sacarlos libres.
Una de las acciones a corto plazo que hará el recién creado comité es visibilizar la existencia de los presos políticos a nivel nacional, luego se hará un trabajo para organizar a las familias y hacer acciones políticas y de protesta para lograr la liberación de los presos políticos.
Este jueves 15 de febrero el comité estará anunciando mediante una conferencia de prensa la conformación de este espacio de apoyo para los presos y perseguidos políticos, y darán a conocer las actividades a seguir en los próximos meses.